lunes, 27 de diciembre de 2010

Pirorigami. (para cerrar el año)




Música de fuego para esta entrada.

Este descubrimiento fue una sorpresa, producto del acaso total, y encontrado en el lugar más improbable que se pueda hallar, o no tanto, que siempre se tiende a la exageración.
Todos los que hacemos origami, nos hemos deparado con lo efímero de nuestro trabajo. Llega un momento en que se deteriora, se afea, porque es papel, y el papel tiene su tiempo de permanencia, (así como también las personas que lo hacemos). Y nada más apropiado que el fuego para darle fin, y nada mas utilitario que este fin nos prepare nuestro alimento; lógico que con la ayuda de un buen asador. (“Un aplauso para…!!!!”).

Convocamos entonces a "La bomba de tiempo" para que nos ponga el ritmo adecuado. Otra buena sorpresa encontrada en este regreso.

Asados uno siempre hace, y para eso hay que encender fuego, prender el carbón. Este método me sorprendió por la simplicidad y eficiencia y, como puede verse en las fotos, funciona perfectamente. Necesitamos hojas de diario y una botella. Unas seis o siete hojas son suficientes. Se trata de hacer tiras enrolladas en diagonal con las hojas de diario, de tres centímetros de ancho más o menos, y después hacer con ellas unos anillos que calcen en la botella.

"Asado con cueros" es el tema, y para quien no lo sabe Este grupo practica algo así como una improvisación dirigida, donde el director sugiere o indica por medio de señales los caminos a seguir, es algo raro, y único.



Entonces, colocamos la botella en el lugar donde se va a hacer el fuego,
ponemos los siete anillos en el cuerpo de la botella y empezamos a apilar el carbón alrededor, hasta donde lleguen los anillos o aguante el peso del carbón. Después sacamos la botella con cuidado, y ya está lista nuestra chimenea origamìstica (y si la hemos hecho con siete anillos, es más mística todavía). Para prenderla basta tirar un pedacito de papel encendido, y ya está, es solo esperar que se hagan las brasas. O, para ser más místico aun o más origamista, podemos utilizar una pieza de origami que ya haya cumplido su ciclo, entonces le prendemos fuego y la tiramos en nuestra chimenea. O, también podemos hacer un tsurù, prenderlo fuego, y mientras lo tiramos dentro de la chimenea, pedimos un deseo. Pájaros de fuego anidan en nuestro corazón.



La percusión como compás del corazón, un dialogo de tres voces: director, músicos, y público.



He omitido las fotos del después, es decir del asado propiamente dicho, para no despertar apetitos insaciables. Sepan disculpar esta falta, como asi tambien la propaganda de la bebida cola.


Felices Fiestas!!!!! para todos los que visitan este blog, y para los que no, tambien.




Para más datos sobre “La bomba de tiempo” visitar
http://www.labombadetiempo.com/