domingo, 10 de agosto de 2014

Cuckoo Clock

Para esta entrada, tentando retomar una mecánica. vamos a convocar a que me acompañe a Jethro tull.
Banda impresionante!


Para los que quieran saber como opera el olvido, en el papel específicamente, o más aun, en el origami, aqui una muestra. Este es (o era), el Cuckoo Clock de Robert Lang, cuyo diagrama está en el libro: "The complete book of origami"

Bien. Fue plegado hace como 10 años en otras latitudes, un poco más al norte, en tierra tropical. Para quien no sabe, es un solo pedazo de papel en las proporciones 1:7, creo que éste es de 40 x 280 cm, lo que da un modelo de 21 cm. la casita, y unos 10 cm. más de péndulo. La particularidad de este modelo, por si no bastase él mismo como cosa muy particular, o especial, es que tiene movimiento, (en el caso de este mi añejo cucú, tenía) tirando de una punta que sale por abajo, delante del péndulo, la puerta de la casa se abre y se cierra, lo que hace que el pajarito también salga y entre. Digamos para buscar un lugar común, "solo le falta hablar" o sea en el lenguaje universal de estos aparatos, decir "cuucu cuucu" cada vez que anuncia las horas, pero bueno, éste no anuncia las horas, está clavado en las cuatro, marcando la eternidad del té.
Pero esto no era para hablar del modelo específicamente sino del paso del tiempo, sobre las piezas de origami. ya escribí sobre esto también hace algunos años en este blog: aquí. y la conclusión es la misma, las piezas de origami tienen un tiempo de vida, inevitablemente deberán ser descartadas con el pasaje del tiempo. Esta particularmente estuvo abandonada, olvidada dentro de algún armario, está totalmente abollada, llena de polvo, y con olor a humedad, (aquella que los trópicos saben sentir) Tal vez sea una enseñanza, el desapegarse, el sacarse de encima lastres pesos que cargamos, o recuerdos, u olvidos, que es por donde empezó esto.

Si no me equivoco, el disco en el que esta esta "Serenade to a cuckoo" This was, es el primero de la banda, del año 68, mi primer cuckoo clock no es tan antiguo, pero si es el primero.

Los olvidos, aclarando, que yo me acordaba perfectamente de haber hecho esta pieza, es más, hice otro algún tiempo después de este, y por supuesto que salió mejor. Hacer una pieza como ésta no es cosa que se pueda olvidar, me llevó varios días. La cuestión del olvido es porque no pensé que todavía existiese éste cuckoo. Porque había quedado por los "allases" pero. Oh sorpresa! mi hija me lo trajo ayer a su regreso de las vacaciones de invierno. y obviamente, de nuevo, tendré que hacer ese proceso de duelo por él, porque no le queda otro destino sino ser parte del “origami pirotécnico" de aquel post también antiguo. Es decir, prendamosle fuego a los olvidos, tiremoslos a la chimenea del ayer y recordemos lo recordable, si lo hubiere. A hacer lugar, que vienen empujando!!!!

2 comentarios:

Liliana dijo...

YA LO DEJASTE?

SALUDOS =)))

Gregorio Omar Vainberg dijo...

Todavía no lo tiré al fuego.